Aldous Huxley
Mucho tiempo ha pasado desde la última entrada, en estos tiempos en los que siempre se llega tarde a crear una publicación o a colgar la foto, soy incapaz de seguir ese ritmo vertiginoso.
No es mi ritmo, nunca lo ha sido, tengo que pensar, crear, volver a pensar sobre lo creado, dudar de si merece la pena, diseccionar el trabajo realizado, volver a dudar.... tantas cosas llevan su tiempo.
Y claro está, todo esto mientras transcurren los días, unos muy rápidos y otros muy lentos y yo en medio, a mi ritmo, dejándome llevar por su vaivén o engañándome creyendo que ellos se adaptan a mí.
Pero lo que está claro, es que por muy intangible y escurridizo que sea, ese tiempo está ahí o ha estado y a veces tengo la suerte de poder guardarlo en una imagen, para recordar que el tiempo nunca se va, no desaparece, aunque parezca que algún día estuve horas viendo como transcurría, como se iba desvaneciendo sin dejar constancia de que estuvo aquí en algún momento y otros días lo vi fugarse, corriendo, huyendo sin saber a donde iría.
Ahora llegan días en los que volver a buscar ese tiempo, echar mano a la memoria y no solo la mental, sino a la memoria que guarda mi disco duro y ver fotos, seleccionar, decidir que quiero contar a través de ellas, y sobre todo, lo más importante, volver a vivir ese tiempo que pasó, pero que no se fue, porque irremediablemente en esos trocitos de imagen, se encuentran guardadas muchísimos momentos e historias de un tiempo pasado.
Prontito las iréis viendo en forma de entradas de este blog, prontito, cuanto el tiempo vaya decidiendo si llegó el momento...
No hay comentarios:
Publicar un comentario